domingo, 27 de septiembre de 2009



los mil gestos que puedo reconocer en tus ojos

aquellos mismos que en palabras

los describia como de niño

como contagioso

las mil sonrisas en el mar de tu sonrisa amplia

como la playa de necochea en invierno

como el mar incrustado en incontables caracoles

las mil miradas de tus palabras

escondidas atrás de una noche con ruido a rio

y olor a humedad tempranera hecha bruma

como tu amor

hecho nube en la tierra

las mil caricias que nunca contabilicé

pero me las sé tan bien

siento once dedos manoseando las venas

de mis cicatrices hechas viento

en tu pecho

en tu huequito

afloran las más diversas conversaciones

entre tu corazón y el mío

entre almas hechas cuerpo

alguna mañana

en la que no sabia ni siquiera mi nombre

si sabiendo el tuyo

en la que no sabia si queria otra cosa

que no fueses vos.





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miles de textos con mensajes

a parpadeantes pantallas acorta-distancias

con mil imágenes

de la mujer así, en su afán de pensar

y en las órbitas de sus nubes

giran

los sí rotundos y los no con caras de pobres muertos

como quien quiere ser reconocido o nombrado

los no impresionistas, y los sí con cara de miedo.

y ahí giran

pero nadie le da la mano a la mujer

para cruzar la calle

la deben confundir con un árbol

tan enraizada con su cabeza

y sus nubes

es probable que llueva?

digo

alguien puede probar que en mi vida

o la de la mujer

algún día van a llover respuestas?